¡Buen paseo!
Cementerios, escultura funeraria, arquitectura funeraria, modernismo, Barcelona antigua, fotografía
miércoles, 29 de febrero de 2012
Paseando por la Barcelona de 1926
Desde las Ramblas vamos subiendo, mientras observamos a la multitud casi toda con la cabeza cubierta, las paradas de las pajarerías que en aquel tiempo eran de quita y pon, montaban la parada por la mañana y la recogían por la noche. Llegamos a la Plaça de Catalunya, dejando Canaletas a la izquierda nos topamos con el Café Zurich, la casa de Pich i Pon y el Hotel Colón, seguimos por Paseig de Gràcia y después por Gran de Gràcia. Un paseo que se realizó hace 86 años, toda una vida. Para mi es un joya encontrar estas grabaciones, gracias a los que las realizaron porque 86 años después nosotros podemos disfrutarlas, nos permiten pasear con nuestros antecesores y también hacen pensar en que la vida del ser humano es infinitamente más corta de lo que pensamos. Gracias también a quienes poseyendo estos recuerdos los comparten con los demás.
¡Buen paseo!
¡Buen paseo!
domingo, 26 de febrero de 2012
El soldado de la Plaça Catalunya
La historia cambiante de la Plaça Catalunya (Barcelona,
España) ha dado hasta para escribir un libro, una obra muy interesante de Lluís
Permayer. En este blog ya hay alguna entrada sobre ella y hoy quiero enseñar la
fisonomía que tenía el año 1937.
El 14 de marzo de ese año, en plena Guerra Incivil el
Presidente de la Generalitat en aquel momento, Lluís Companys inauguró una
estatua que llevaba por nombre, “Al
soldat heroic del poble” (Al soldado heroico del pueblo) en el centro mismo de
la Plaça Catalunya. La figura estaba en guardia, con la bayoneta calada, no sé
las medidas, pero los periódicos de la época hablaban de “proporciones
colosales” enorme sí que era desde luego. Estaba confeccionada en yeso de color
tostado y nada se sabe del autor. El monumento tuvo corta vida.
La foto corresponde al día de su inauguración, a la
izquierda se puede ver el desaparecido Hotel Colón convertido en sede del PSUC
con la fachada llena de carteles y pancartas y a la derecha la Casa Pascual
i Pons proyectada en 1890 por Enric Sagnier i Villavecchia.
viernes, 24 de febrero de 2012
Cementerio monumental de Milán (Italia) 2
Esta escultura de Luigi Crippa es una de las más antiguas
del Cementerio Monumental de Milán, pues data de 1869. Luigi Crippa nació en
Monza en 1838 y falleció en Sovico en 1895. Estudió escultura en Milán en la Academia de Brera. Empezó a exponer en
1859 en Turín. Durante los años sesenta realizó obras públicas y privadas,
algunas de ellas se encuentra en el Duomo de Milán, el Cementerio Monumental y
para la catedral de Sacile. Se pueden encontrar obras de Crippa en Chiari,
Pavía etc. También en la Galería De Arte Moderno de Milán y en el Museo Cívio
de Padua.
En la obra del monumento de Giovanni Maccia podemos ver
una puerta entre abierta, el paso misterioso al más allá, tema, que se repite
en numerosos monumentos funerarios del
siglo XIX, recordando la invención de Antonio Cánova en su célebre monumento
funerario de María Cristina de Austria de 1805 en Viena. En el monumento que
nos ocupa hay una doble significación: el umbral hacia la nueva vida, el paso
que ya ha dado el difunto a la entrada hacia un mundo de felicidad y piedad
cristiana. Su esposa y sus hijos se encaminan hacia él. Giovanni Maccia (su
busto se aprecia en lo alto de la puerta) fue uno de los fundadores de la
Parroquia de San Satiro, donde asistían a mujeres embarazadas, las madres y los
niños pobres.
En la parte alta del monumento las figuras de la
Esperanza con el símbolo característico del ancla, la Fe y la Caridad nos enseñan el
sentido religioso y místico.
miércoles, 15 de febrero de 2012
Cementerio de Picpus (París)- Cimetière de Picpus
Si no se va avisado previamente, encontrar el cementerio
de Picpus (París) se hace tarea un poco difícil. La vista de unos cipreses o un
conjunto de frondosos árboles sirven para indicar generalmente un camposanto,
pero en este caso este indicativo falla.
El cementerio de Picpus (el único privado de París) se
encuentra detrás de esta fachada, bueno, no exactamente, a través de las fotos
haré el recorrido hasta llegar al cementerio y a las fosas.
Después de haber
traspasado la puerta me encuentro una plaza rodeada de viviendas y enfrente con
la Chapelle Notre Dame de Paix, dónde los domingos se celebra misa a las 10´30.
Al lado de la Iglesia, a la izquierda hay una cancela pintada en color azul,
al
verla el primer pensamiento es que lógicamente detrás de ella está el
cementerio pero continúan las sorpresas y al traspasar la puerta delante de los
ojos aparece una gran zona con un manto de hierba y muchos árboles, una
escultura recordando a San José y Jesús y una peana con el arcángel San Miguel, un
lugar que te llena de paz y serenidad.
Otra puerta azul, esa sí, es la entrada
del cementerio.
Pero antes de seguir un poco de historia del lugar. En el
siglo XVII era un convento de monjas, primero de la orden de las Chanoinesses
de Notre Dame de Lépante y después de las Chanoinesses de Saint Agustin. En
1792 les fue confiscado como bien nacional y alquilado por zonas. El 13 de
junio de 1794 el lugar fue visitado por dos funcionarios y poco después
abrieron una brecha en el muro (por dónde entrarían los carros con los
difuntos) del jardín y cavaron un gran hoyo. Poco más tarde excavaron dos hoyos
más, el tercero, no fue utilizado. Más de 1300 personas fueron guillotinadas en
la plaza du Trône Reversé (hoy Place de la Nation) y enterradas en aquellos
hoyos excavados previamente.
En 1797 con gran secreto el lugar fue vendido a la
princesa Amélie de Salm de Hohenzollern-Sigmaringen, el hermano de ésta había
sido guillotinado y enterrado en una de las fosas. En 1803 todas las tierras
del antiguo convento fueron compradas por un grupo de familias de los
enterrados en las dos fosas, con el derecho de poder ser enterrados tantos
ellos como sus descendientes. La lista de todos los inmolados puede verse
dentro de la Iglesia. Nombres de notables guillotinados:
Familia de La Fayette, Andre Chenier, Montmorency, Levis,
Gramont, Talleyrand, Rohan-Chabot, La Rochefoucauld, Luynes, Montalembert,
Noailles, Biron, Polignac, las 16 carmelitas de Compiègne etc.
Con la caída de Maximilien de Robespierre el reino del
terror llegó a su fin.
Ya hemos llegado al cementerio, no es muy amplio y muy
poca obra escultórica se puede admirar, pero evidentemente a este cementerio no
se viene a buscar eso. Todo está envuelto por la dura historia francesa. Una
última puerta separa el lugar donde descansan los descendientes de los que
fueron guillotinados y enterrados en las fosas comunes, esa puerta está cerrada
y solo a través de sus barrotes se pueden ver las placas conmemorativas, unos
pequeños monumentos y el trozo de tierra que guardan a los más de 1300
ejecutados. Estoy en el centro de París pero no se escucha ningún ruido, todo
está en calma, ningún visitante más…
Rue de Picpus, 35
12 Arrossidement
Metro: Nation
Horario:
De abril a agosto abierto de martes a domingo de 14 a 18
h.
De octubre a mediados de abril de 14 a 16 h.
Etiquetas:
Cementerio de Picpus,
Cementerios de París
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