El cementerio
de Horta fue inaugurado en el año 1867, muy alejado de las viviendas como se
puede apreciar en esta foto (1). Su forma es cuadrada (2), en todo su perímetro
están sus 1236 nichos. En la parte central están los panteones y tumbas.
En varias
tumbas se pueden encontrar escudos nobiliarios.
Otro ángel con las alas arrancadas, tristemente verlas en el suelo una y otra apoyada en la puerta del panteón Marsans, también le falta una mano en la que llevaba un pomo de flores (marzo 2012)
En la foto de abajo se puede apreciar el ángel antes de que sufriera los actos vandálicos.
Por ello una
vez más insistiré en mi particular cruzada y la de muchos otros: dejarnos
fotografiar tranquilamente, nosotros tenemos un enorme respeto porque admiramos
el arte que se puede encontrar en los cementerios de Barcelona en este caso. Respetamos
infinitamente a las personas que van a visitar a su ser querido y nunca
estaríamos a su lado haciendo fotos ¡es de sentido común! Etc. A quien hay que
vigilar, llamar la atención o lo que sea menester es a esos sujetos que no
respetan lo de los demás y privan a todos de disfrutar de las obras de arte.
Cierto es, y lo agradezco inmensamente que si pedimos permiso por escrito siempre es concedido. Lo escrito va dirigido a los que han puesto estas normas, ¿no se han paseado o ha llegado a sus oídos que en otros cementerios europeos no ponen ningún problema a que sean fotografiados?
Cierto es, y lo agradezco inmensamente que si pedimos permiso por escrito siempre es concedido. Lo escrito va dirigido a los que han puesto estas normas, ¿no se han paseado o ha llegado a sus oídos que en otros cementerios europeos no ponen ningún problema a que sean fotografiados?
Otro hermoso
panteón es el que, sobre un sepulcro se alza la figura de una mujer con mirada
desconsolada con flores en las manos que le van cayendo encima de la tumba.
Casi
enfrente, un ángel tapándose la cara expresa su dolor, mientras en su mano
izquierda lleva un pequeño ramo de flores.
Otra bella
tumba es la de la familia Marcet Planàs obra de Enric Sagnier Villavecchia
(1858- 1931) esculpida en mármol, finalizando la obra con una columna quebrada
cuyo significado depende de donde se consulte significa una vida joven
truncada, un matrimonio que no tuvo descendencia o signo masónico, hay dónde
elegir.
Hay un nicho,
el nº 110, cuya lápida es mucho más pequeña que las demás de gran valor, no se
aprecia ninguna letra, solo la efigie de un ángel y el símbolo del reloj de
arena alado, este símbolo sí que es unitario, “tempus fugit” la brevedad de la
vida.
En este
cementerio, que me conste, no hay personajes conocidos a excepción del que fue
presidente del F.C. Barcelona entre 1953 y 1961, Francesc Miró-Sans i
Casacuberta.
Para
finalizar el paseo por el cementerio de Horta, algunas imágenes más para dar
una idea de este pequeño y encantador recinto.
La foto inferior muestra la pequeña capilla del cementerio, el panteón Marsans es mucho mayor.
La foto inferior muestra el pasillo central.
(
