Hace unos cuantos días, concretamente el 27 de
febrero se ha cumplido el 75 aniversario de uno de los ilustres que están
inhumados en el cementerio de Montjuïc. El diario La Vanguardia nos has servido
de memoria histórica al recordarle.
Mariano Foyé Ràfols, fue el impulsor del vuelo
sin motor.
El pionero catalán del vuelo sin motor durante una exhibición en los años 30. Arxiu Ramon Brugueras Foyé
El piloto catalán falleció el 23 de febrero de 1937 a consecuencia de las
heridas recibidas cuatro meses antes durante un combate aéreo en el frente de
Aragón. Periodista y gran impulsor de la aviación a vela en Catalunya.
Mariano Foyé Ràfols había nacido en 1904.
Fue periodista de la sección de Deportes de La Publicitat desde 1928. Profesor de la Escola de
Treball desde 1933. Técnico de los Serveis de
Aeronàutica de la Generalitat en mayo de 1936.
Piloto militar de la aviación republicana desde el estallido de la Guerra
Civil. Pero siempre fue, durante su corta vida de 33 años, un apasionado de la
aviación y el principal promotor en Catalunya de la disciplina de vuelo a vela.
Impulsó desde joven múltiples iniciativas
para fomentar aquella modalidad aérea. Como socio de la Liga Aeronáutica de
Catalunya, en 1928 fundó dentro de esta, una sección de vuelo a vela. Impartió
conferencias para divulgar la especialidad en los más diversos foros (a veces
acompañadas de proyecciones de películas sobre los concursos de vuelo sin motor
en Alemania). Promovió la Primera Semana de Vuelo sin Motor, celebrada en Puigcerdà en 1932 y las siguientes: Montseny en 1933 y Sabadell en 1934.
Durante su estancia en Alemania para perfeccionar la técnica del vuelo a vela. Arxiu Ramon Brugueras Foyé
En 1930 colaboró con Joan N. Klein en la construcción de la avioneta Klein-2, provista de un motor Anzani de 35 HP, que obtuvo unos
resultados satisfactorios. Un año más tarde, fundó los Falziots de Palestra, asociación puntera en el vuelo a vela, con los que
realiza cursillos y exhibiciones dominicales en el aeródromo Canudas. En 1933, escribió “Resum d’ Aviació” (Resumen de la aviación), uno de los primeros
textos divulgativos sobre aeronáutica editado en Catalunya.
El Servicio de Aeronáutica de la
Generalitat lo envió a la escuela de pilotos de vuelo sin motor de Grunau, Alemania, donde el 10 de abril de 1934 obtuvo el
título C de piloto de vuelo a vela. Un mes más tarde, el de profesor. Antes de
regresar, aun tuvo tiempo de batir el récord de España de permanencia en el aire en un avión sin motor, que
detentaba el piloto militar Peñalver. Foyé voló durante
cinco horas y cinco minutos.
Durante los siguientes años siguió
realizando conferencias, cursos para pilotos e instructores, demostraciones
aéreas por toda Catalunya y escribiendo en el diario La Publicitat.. El 27 de mayo de 1936 el departamento de Economía de la Generalitat creó el
Centro de Vuelos sin Motor de la Generalitat de
Catalunya y Mariano Foyé fue nombrado funcionario técnico.
Al estallar la Guerra Civil española, Foyé
fue uno de los primeros pilotos civiles en incorporarse a la aviación
republicana, siendo destinado a la escuadrilla Alas Rojas, con base en el aeródromo de Sariñena en el frente de Aragón, donde alcanzó el grado de
alférez.
El 19 de octubre de 1936 durante un
combate aéreo entre Grañén y Tardienta contra una
escuadrilla de Junkers alemanes su avión, un Dragon Rapide, fue derribado en las cercanías de la población
oscense de Vicién. Fallecieron cuatro
tripulantes y Foyé resultó herido de gravedad. Trasladado a Barcelona, no pudo
recuperarse de las heridas producidas por la metralla, muriendo el 23 de
febrero de 1937. Fue enterrado en Montjuïc tras un funeral público presidido por las autoridades
de la aviación militar y civil.
La esquela de Mariano Foyé con un error tipográfico.
En abril le fue concedido a título póstumo
el empleo de teniente En agosto, el Ayuntamiento de Barcelona decidió dedicarle una calle. Aunque no fue hasta el
19 de julio de 1938 cuando se le dio el nombre de Mariano Foyé a las calles de Unión
y Barbará. Tras
la entrada de los franquistas en Barcelona, en enero de 1939, las viejas
arterias del Raval recuperaron sus
nombres y un inmerecido olvido extendió su manto sobre la figura de Mariano
Foyé…
Nada, solo silencio roto por la
circulación de la Ronda Litoral y las gaviotas que planean por encima del
cementerio....
merecieron un recuerdo. Montjuïc tiene muchos señalizados, pero aún queHay muchas personas, en su momento públicas que deben ser recordadas. El que fue en su época un personaje conocido, admirado y aplaudido sigue su descanso olvidado por la mayoría, pero nunca por todos. ¿Cuántos saben que está inhumado en esta ciudad de los muertos que es Montjuïc, Mariano Foyé? Otros cementerios señalan las tumbas de todas las personas que en su momento y por sus méritos de diversa índole dan muchos más por hacerlo.
Desde este blog intentaré ir recuperando personajes que descansan casi en el anonimato, cuando han sido personajes más o menos claves en nuestra historia.
Desde este blog intentaré ir recuperando personajes que descansan casi en el anonimato, cuando han sido personajes más o menos claves en nuestra historia.
Habrán personas,
que el caso que nos ocupa no les interese, pero otras, como aficionados a la
aeronáutica, u otras que les interese toda nuestra historia, también por
comentarios de nuestros mayores sepan quien fue y lo que significó en su
tiempo. Si hubiera un simple pie con una placa sería mucho más fácil encontrar
su tumba, en este caso un nicho con un dibujo en alusión a lo que se dedicaba
Mariano Foyé. No hay nada artístico en su tumba, tampoco le hace falta. Quien
quiera acercarse está cerca de donde descansa Francesc Layret i Foix (este sí
que tiene una placa)
Un pie con una simple placa marcando dónde descansa. Con gestos así el
cementerio de Montjuïc también ganaría más prestigio al recordar a decenas de
personas que hicieron historia y que pasan desapercibidas.
7 comentarios:
Pues no tenía ni idea, gracias por compartirlo y por el estudio realizado
Un placer, como siempre, descubrir parte de nuestra historia.
Estoy de acuerdo contigo en que deberían indicarse las tumbas de todos los personajes que alguna vez fueron célebres.
Un abrazo.
No lo conocía y me ha parecido muy bien la reseña de este personaje casi olvidado. Un saludo.
Muy interesante pues no conocia al Sr. Foyé. Estoy totalmente de acuerdo que ciertas tumbas con personajes mas o menos ilustres deberían estar indicadas de lo contrario pasan totalmente desparecibida. Besos.
Hola Mar.
Una vez más nos muestras que en el siglo pasado se conseguierón muchos logros gracias a gente como está avanzada a su epoca.
Un beso.
(Revisa tu correo)
Hola;
Soy Ramón Brugueras Foyé, nieto de Marià Foyé.
Gracias por tu espacio dedicado a mi abuelo. Pongo a tu disposición más información en www.ramonbrugueras.com
Durante años me he dedicado a recuperar su memoria. El 23 del pasado mes de Montjuich homenajearle. Me hubiera gustado tanto conocerle.
Hola;
Soy Ramón Brugueras Foyé, nieto de Marià Foyé.
Gracias por tu espacio dedicado a mi abuelo. Pongo a tu disposición más información en www.ramonbrugueras.com
Durante años me he dedicado a recuperar su memoria. El 23 del pasado mes de Montjuich homenajearle. Me hubiera gustado tanto conocerle.
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